
El extremo abulense solo ha participado en seis partidos saliendo desde el banquillo y en total ha jugado 128 minutos, una cifra muy baja para un jugador que el club catalán dejó salir para que se fogueara en Segunda B, ya que no iba a tener demasiado protagonismo en Segunda. Lo peor es que a Nacho Pérez la experiencia no le está sentando nada bien y el pasado 20 de noviembre, en el partido que el Real Murcia disputó contra el Jaén en la Nueva Condomina, pagó su enfado con Pedro Quesada, el preparador físico del equipo grana. Nacho Pérez, que entró en la convocatoria y que calentó en la banda durante la segunda parte, se cabreó cuando finalmente comprobó que no iba a entrar al terreno de juego.
El jugador se lo reprochó al propio Quesada seguidamente, tanto en el banquillo como en el vestuario, delante de otros compañeros. Desde entonces, Nacho Pérez no ha vuelto a ser convocado por Paco García. El club grana le dejará salir en invierno, ya que no quiere que el carácter impetuoso e inquieto de Nacho Pérez afecte al vestuario si éste no juega. El jugador, por su parte, se quiere marchar y ya ha asegurado dentro de la caseta que se ha comprometido con otro equipo a partir de enero. Nacho Pérez, que jugó sus últimos 23 minutos como grana el 13 de noviembre en Mancha Real, fue una apuesta personal de Fernández Romo, que no ha cuajado en el equipo grana y que tendría que cambiar por completo para revertir la situación y volver a tener opciones de jugar con la camiseta grana.
Fuente: La Verdad